La Barcelona azul
Pasear por el litoral de Barcelona es mucho más que un paseo agradable: es entrar en contacto con la tradición marítima milenaria de la ciudad. Tanto si te bañas en alguna de sus playas como si paseas por el barrio de la Barceloneta, con su tradición pesquera (de hecho, la Cofradía de Pescadores de la ciudad sigue hoy en día activa y diversas familias viven de ella proveyendo de pescado fresco y km0 a diversos restaurantes de la ciudad), como si disfrutas de alguna de las actividades de ocio marítimo, estarás entrando en contacto con una parte fundamental del modo de vivir barcelonés.
Puedes empezar combinando el verde y el azul paseando por el Parc del Litoral que transcurre a lo largo del frente marítimo y te lleva hasta las playas, los parques y los barrios vinculados directamente con los Juegos Olímpicos de 1992. Después llegarás a la Zona Fòrum, una herencia del Fòrum Universal de les Cultures 2004 y que hoy es una gran zona para celebrar grandes acontecimientos. Allí hay instalada una gran pérgola fotovoltaica que genera 550 mil kilovatios por hora y suministra de energía los equipamientos y edificios vecinos.
Las amplias playas de la ciudad te van a enamorar: casi 5 km de arenas finas y doradas y de aguas poco profundas. Sin duda, se trata de uno de los mayores espacios de ocio y relax para la ciudadanía de Barcelona. Todas ellas son accesibles para personas con movilidad reducida, que además cuentan con un servicio de asistencia para el baño en época estival. Podrás llegar hasta las playas de forma cómoda en transporte público o en bicicleta. Y, por supuesto, la gestión de las playas de Barcelona sigue una rigurosa política ambiental que incluye un compromiso de mejora continua y de prevención de la contaminación, certificado con el ISO 14001:2004
Y si aún te quedan ganas de agua, tienes la opción de pasear a pie o en bicicleta a lo largo de los dos ríos que delimitan la ciudad. El espacio recuperado junto al río Besòs está rodeado de lugares de gran valor natural y paisajístico. El delta del río Llobregat es el segundo en extensión de Catalunya y sus alrededores albergan una gran variedad de hábitats, fauna y flora. Es tanta su riqueza botánica y de fauna que el Consejo de las Comunidades de Europa ha declarado Zona de Especial Protección para las Aves más 900 hectáreas, de las cuales cerca de 500 hectáreas son Reserva Natural Parcial.
El azul, como ves, también es el color de Barcelona.